CAMINANDO CON JESUS, CRISTO MIGUEL - 08 - JUAN EL BAUTISTA
Los hijos de Zebedeo, Juan y Santiago fueron al vado de Pella sobre el
río Jordán a encontrarse con Juan el Bautista y se ofrecieron a ser bautizados.
Esto fue en diciembre del año 25 y desde ese momento lo visitaban casi
semanalmente y traían noticias a Jesús.
Juan el Bautista había nacido en marzo del mismo año que el Maestro, según la promesa que el Arcángel Gabriel le había hecho a Isabel en junio del año anterior. Vivían en la Ciudad de Judá, a unos 6 km de Jerusalén.
En esos tiempos la mayoría de los judíos, influidos por las enseñanzas
de los llamados “apocalípticos” esperaban que durante esa generación finalmente
serían liberados del sometimiento político, con la llegada de un nuevo reino.
Muchos creían que ese nuevo reino podía ser instalado personalmente por Dios, con una intervención divina directa.
El vado de Pella tenía un significado histórico ya que por allí habían
pasado Josué y los Hijos de Israel cuando llegaron por primera vez a “la tierra
prometida”.
Juan el Bautista transmitía la sensación de ser algo más que un profeta
y rápidamente tuvo muchos seguidores de su palabra.
Además “bautizaba” a cada uno de los nuevos creyentes de una manera que nunca antes habían visto y perdonaba así los pecados. Creó una verdadera conmoción en toda Palestina.
Lo sacerdotes enviaron una delegación a preguntarle si se consideraba el nuevo Mesías. Juan les respondió diciendo: "Id a decir a vuestros jefes que habéis oído 'la voz de aquel que clama en el desierto', como lo expresó el profeta diciendo: `Preparad el camino del Señor, enderezad una senda para nuestro Dios. Todo valle será colmado, toda montaña y toda colina serán allanadas; el terreno accidentado se volverá llano, y los lugares rocosos se convertirán en un valle liso; y todo el género humano verá la salvación de Dios.'"
De todos modos, Juan tenía algunas ideas confusas sobre cómo sería el reino y su rey. En el pueblo de Adán fue donde por primera vez hizo mención a Jesús cuando otra vez lo interrogaron sobre si él era el mesías. Dijo "Después de mí vendrá uno que es más grande que yo, ante quien no soy digno de inclinarme para desatar las correas de sus sandalias. Yo os bautizo con agua, pero él os bautizará con el Espíritu Santo”.
El sábado 12 de enero del año 26 los hermanos de Jesús, Santiago y Judá llegaron a verlo. Habían pensado bautizarse con Juan y le pidieron consejo.
Jesús les pidió que dejaran pasar esa noche y al día siguiente les
contestaría. Durmió poco en conexión con el Padre en estrecha comunión.
A la mañana del domingo Jesús siguió trabajando en el astillero,
habiendo quedado a almorzar con sus hermanos y hablar del tema del bautismo.
Ellos esperaban que se hiciera la hora del almuerzo, ya que sabían que su
hermano era muy dedicado con el tiempo que destinaba a las tareas laborales.
En la pausa del mediodía Jesús se quitó el delantal y a sus 3 compañeros
de tareas les anunció “Ha llegado mi
hora” y fue a encontrarse con sus hermanos repitiendo “Ha llegado mi hora, vamos a ver a Juan” y partieron para Pella.
Se detuvieron a pasar la noche a orillas del Jordán y llegaron donde
Juan al mediodía del 14 de enero del 26 d.C.
Al llegar, Jesús y sus hermanos se colocaron en la fila de los que
esperaban a ser bautizados. Juan, ocupado en atender a tantos penitentes no vio
al Hijo del Hombre hasta que lo tuvo enfrente.
----------------
IR AL PRÓXIMO CAPÍTULO
IR A OTRAS PUBLICACIONES:
VIVIR HASTA LOS 130 Ayudando a entender el camino hacia la 5ta dimensión
LA NUEVA HUMANIDAD El nacimiento del Humano Luz
CUENTOS A LA HORA DE LA SIESTA Para mi nieta Cielo
Comentarios
Publicar un comentario